PERDIENDO EL CAMINO DEL ÉXITO

Nos hemos cansado de repetir que nuestro optimismo estaba fundamentado en el cambio que veíamos en el equipo desde el día de la derrota en Getafe. Ahora intuimos que hemos perdido las vías que nos marcaban el camino y nos mostramos perdidos y sin referencias.
El cambio que apreciábamos desde aquellas declaraciones de Puyol en las que decía que se tenían cambiar cosas si se quería ganar algo está temporada se basaba en 3 aspectos. Cambios en la rutina diaria, alineaciones basadas en estados de forma y un mayor trabajo táctico sobre el campo.
Dentro del primer punto hay varios aspectos significativos. Por ejemplo la introducción de las dobles sesiones de entreno, el retrasar la vuelta a casa en los desplazamientos para mejorar el descanso, entrenos las mañanas antes de los partidos, etc. Todo esto se veía en el campo, estando mejor físicamente cada semana y ganado algunos partidos por un mejor físico que el rival.
El cambio más visible fue el de las alineaciones. De un plumazo, Ronnie dejó de jugar fuera, Champions incluida, ya que había jugadores que podían aportar más que él. Así, el grupo cerró filas y se veía una mayor solidaridad dentro del campo que hacía que el equipo mejorase defensivamente.
Relacionado con esto, Frank basaba todo el 11 alrededor de la seguridad defensiva. Era difícil ver sufrir a Valdés. Cuando sufría eran momentos puntuales, nunca durante todo el encuentro. La concentración era máxima y apenas se veían desajustes tácticos.
Con todo esto, llegó el día de la visita de Glasgow y el equipo ofreció una imagen acorde a lo que se venía intuyendo desde aquel fatídico día de Getafe. Los 2 siguientes partidos fueron excelentes, solo manchados por la falta de acierto contra el Valencia. Todo había vuelto a la normalidad.
Pero no. Desde el 2 a 3 en Escocia, no se han vuelto a ver las dobles sesiones de entrenamientos, las alineaciones han vuelto a ser parecidas a las del inicio de temporada. La defensa lo ha acusado y el equipo se ha vuelto frágil donde más fuerte era, borrando de un plumazo la seriedad táctica conseguida en los últimos 3 meses.
Para saber si es solo un paso atrás para coger carrerilla o es una sentada por falta de fuerzas o por falta de fe solo cabe esperar. De momento, si jueves y viernes no hay doble sesión de entreno, pensaremos que el camino escogido para hacernos pasar un verano con una cara de satisfacción similar a la que teníamos en el 2006 no es el que nosotros escogeríamos.
Estaremos a la espera de los acontecimientos. Esperaremos a ver los síntomas y consecuencias de las decisiones tomadas, pero es una pena dejar de un lado las cosas que te han hecho ir por el buen camino.

POKER INGLES
La clasificación de hoy del Liverpool de Benítez hace que hayan cuatro equipos ingleses en los cuartos de final de la máxima competición internacional, demostrando que ei dinero de inversiones extranjeras en las islas está haciendo que el poder balompédico ya no sea latino, como era hasta hace pocos años.

Hoy ante uno de los llamados grandes del fútbol italiano, con gran parecido en su pesimismo a alguien que nos suena bastante…, ha dado una total muestra de superioridad dejando sin argumentos a los interistas, que se han visto superados de todas en los 2 encuentros de la eliminatoria.
Si en la ida lo que castigo al Inter fue el miedo con que salieron al campo y la expulsión de Materrazzi, hoy ha sido la incapacidad para generar fútbol lo que les ha condenado. Con una defensa donde Chivu era el único que podía dar un pase a más de 5 metros, el Liverpool tenía suficiente con presionar la salida del balón para generar peligro.
Así mientras el central colombiano Ribas falla una detrás de otra, los delanteros reds desaprovechan sus ocasiones de sentenciar la eliminatoria. Solo un error, un golpe de fortuna podía dar opciones de pase a los nerroazurros. Y casi pasa.

A poco más de 10 minutos para la finalización de la parte, la defensa visitante permite que Ibrahimovic se de la vuelta y dibuje un magnífico pase a Cruz. Este tenía SOLO, pero SOLO a Stankovic para que hiciese subir el 1 a 0 en el marcador. Chuto, el balón se fue fuera y con él el sueño de la clasificación.
Tras el descanso más de lo mismo. Todo el peligro era de los hombres de Benítez, que parecía como si fuesen ellos quienes estaban obligados a ganar el partido. Presionando arriba, con las líneas juntas, la defensa muy adelantada, casi sin dejar espacios al oponente.
Pero como siempre en el fútbol, un gol puede llegar de la nada. Casi sucede cuando en el único error del central eslovaco, Skrtel fichado por 8 millones de euros, deja solo a Ibrahimovic que desaprovecha una ocasión clamorosa para marcar. También tenía a un compañero mejor situado, pero le cegó el egoísmo. Falló la ocasión y se fueron todas las esperanzas interistas.

Luego llegaría la justa expulsión de Burdisso, el golazo del niño Torres y las múltiples muestras de impotencia de un equipo que está sumido siempre en la decepción. En los 2 años que han conseguido ganar el Scudetto, uno el Milan les gana la Champions, “restando” méritos a su torneo. En este, su feo fútbol y su proclama de que el objetivo principal del año era Europa, han conseguido que pase lo mismo.
Mal haríamos los cules en reírnos del Inter. Tenemos muchos paralelismos, más de los que pensamos. Los males del Inter en los 90 eran los males del Barça durante los 70 y 80. Fichajes enormes, mediáticos, y pocos títulos grandes.

Esperamos que esos tiempos de sequía y penuria hayan quedado lejos, que las lecciones estén aprendidas y que las vías en las que circula el tren del éxito sean en las que estemos rodando. Nosotros somos hombers de mar, y solo podemos remar, y lo continuaremos haciendo hasta el fin de nuestras fuerzas.

Otros con más medios pueden y deben (re)conducir el tren por el buen camino. ¿ Lo harán?

No sabéis que ganas de que llegue el viernes...

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