FCBARCELONA 2 - ALMERIA 0, PROLONGANDO LA SIESTA

FCBarcelona 2 - UD Almería 0
Henry 37', Messi 80'p

FCB: Valdés, Zambrotta, Puyol (Márquez 45'), Milito, Abidal, Touré (Gudjohnsen 62'), Iniesta, Xavi, Gio, Henry, Ronaldinho (Messi 73')
Almería: Cobeño, Carlos García, Acasiete, Bruno, Mané (López Rekarte 74'), Crusat, Negredo, Soriano, Felipe Melo (Corona 64'), Juanma Ortiz (Ortiz 55')

En partidos como éste es cuando a uno le entran ganas de llamar a DigitalPlus y preguntar si es posible el abono de los 13 euros que ha costado la compra. Partido frío, lento, trabado, sin ritmo que ha propiciado que mucha gente se haya pegado una siesta de 3 de la tarde a 9 de la noche.

Después del tropiezo en Villarreal y el atasco de Glasgow, el Barça tenía una gran ocasión de ya no solo ganar, sinó que también agradar a su respetable y así demostrar que los 2 anteriores partidos no eran fruto de una dinámica y si de 2 momentos circumstanciales.
Rijkaard salía con lo que a priori era la mejor artillería disponible exceptuando la entrada de Giovanni por Messi, que se quedaba en el banquillo por precaución.
Volvían Touré y Zambrotta y Henry se ubicaba en la punta de ataque dándole por fin la banda izquierda a Ronaldinho.

El comienzo del partido ya era un aviso al espectador de lo que llegaría a ser la tónica general de los 90 minutos. Un Barça impreciso y atascado en la zona de creación, con un ritmo de circulación que ni en las retenciones en la autovía de Castelldefels esta semana anterior.
El planteamiento de los almerienses se basaba en tener las 2 línea a s de la defensa y el mediocampo muy juntitas y esperar a tener la ocasión para matar, y la única manera de romper este plan no era otra que mover rápido el balón para abrir alguna fisura. Pero eso no ocurría, además, el Almería empezó a perder tiempo desde el minuto 0, echo que a parte de desquiciar al personal, conseguía aburrir todavía más al espectador.

De la primera parte nos han sorprendido 2 cosas. La primera ha sido la escasa presión que ha efectuado el Barça, permitiendo que el portero Cobeño y sus defensas pudiesen triangular al borde de su área con total tranquilidad. Además, cuando uno de los 3 delanteros (solía ser Henry) presionaba en total solitud, con lo que cualquier intención de presionar quedaba en balde.
Y el segundo aspecto quequeremos destacar es la posición de Xavi. Durante los primeros 45 minutos ha vivido a a escasos metros de Touré. Suponemos que era para apoyar la salida del balón al marfileño, pero esta vez lo único que ha conseguido el de Terrassa ha sido entorpecer más el juego. Touré cogía el balón en el primer cuarto del terreno de juego y Xavi ya estaba a 3 metros esperando el pase. Consecuencias? Pues una transición a ritmo de burro de carga, el principal defecto de hoy sin duda.

A todas estas, minuto 37, balón que pelea Giovanni (el mejor de los de arriba) que a trancas y barrancas llega al área pequeña y el balón sale rebotado con el choque entre el manito" y Cobeño y cae a los pies de Henry que no perdona a puerta vacía.
Con este resultado se llegó al ecuador del partido, y con la baja de Puyol, substituido por problemas intestinales.

En la reanudación, ligerísima mejora basada en el empeño de Dos Santos y el intento de Iniesta en tirar el equipo hacia arriba. Pero el vicio detectado en el primer segundo del partido, continuaba latente. Lentitud... lentitud... lenti.. ZzzZzzzZZzz....
Con el equipo adormecido y el Camp Nou convertido en la biblioteca más grande del mundo (cualquier estudiante podría haber memorizado la lección hoy en el coliseo más frñio que nunca) el Almería se ha empezado a estirar. Tampoco ha creado muchos problemas a Valdés, pero la inquietud ha empezado a sembrar la semilla en el estómago de los barcelonistas.

Y Rijkaard ha tirado de la mejor cafeína para despertar al público. Leo Messi. En el partido que quizás no debería haber jugado ni un minuto para estar a tope en Pucela y no correr riesgos, ha salido por un inoperante e insulso Ronaldinho, de quien todavía se esperan noticias de él.
La entrada de la pulga ha dinamizado un poco el juego culé.
El incertidumbre culé se acaba cuando el colegiado se inventa un penalty sobre Giovanni que transforma Messi en su séptimo gol en la Liga.

De aquí al final poca historia. Henry ha intentado destaparse con un par de jugadas sin fortuna (porque siempre que chuta se tira al suelo?) y un par de gambetadas de Messi que han despertado un poquito al público.

En fin, 3 puntos al saco en un partido del que no le hablaremos a nuestros nietos, por su bien.

No sabéis cuánto nos hemos aburrido hoy!
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