BOSTON GARDEN: ¿TUNEL SIN SALIDA?

Hace muchos años, siendo aún unos críos comprendimos como funcionaba el Draft de la NBA,. Por aquel entonces, teníamos un sueño. Este sueño no era otro que cambiar el funcionamiento del proceso de selección de jugadores por parte de las franquicias de la liga. Considerábamos injusto su funcionamiento y soñábamos con ser unos justicieros.
Años más tarde, un personaje casi desconocido como Bosman, puso en jaque todo el funcionamiento interno del fútbol. Consiguió algo tan elemental como la libre circulación de futbolistas por el viejo continente( limitada solo a los jugadores que pertenezcan a la UE). Algo tan básico, era hasta ese momento algo inimaginable.
Como siempre que algún aspecto de la sociedad se abre a las manos de la libertad, todos salieron ganando, acortando las distancias entre los equipos, a pesar de ciertas proclamas catastrofistas de los iluminados de siempre que anunciaban que el fútbol quedaba reducido a los 4 equipos con dinero. Nunca antes el fútbol ha estado tan igualado como a partir del 96(no solo por la Ley Bosman, pero ésta influyó y mucho)

Decimos todo esto para aportar una visión que nadie ha dado del caso Navarro. Mucho hablan que Juan Carlos se encuentra atrapado en una prisión( como un Scofil cualquiera) pero no se paran a pensar porque. Dan por sentado que el jugador y el club firmaron un contrato y que ahora el jugador quiere romperlo y el club no le deja. NO. El draft no funciona así.
Una vez establecido el orden de elección de los equipos, las franquicias escogen a los jugadores que más les interesan para completar sus plantillas. Una vez completada la elección, los equipos tienen la potestad de firmarles el contrato a los jugadores, lo cual quiere decir que formarán parte del roster de la temporada.


Si el club no le interesa el jugador, no le firma nada, pero se queda con los derechos hasta el momento que los ceda a otro equipo o renuncie a ellos.Y en esas se ve Navarro. Fue una elección alta de la segunda ronda del draft. Fue seleccionado por los Wizards, por aquel entonces jugaba un tal MJ. No le firmaron contrato, pero se quedaron con sus derechos. En estos ya casi 7 años desde que la Bomba fue seleccionado por Washintong, el equipo capitalino no ha cedido sus derechos a otro club, sabedor de la valía del jugador.


Bien ante esto, Navarro, HORROROSAMENTE asesorado hasta el momento , puede hacer 2 cosas. Callarse, agachar la cabeza y volver al club, donde después de un estirón de orejas, le volveremos a amar como siempre, o hacer historia.Para ello debe contemplar varias cosas.En pleno siglo XXI aún existen aspectos en la vida en que un amo puede disponer de una persona sin el consentimiento explicito de ésta.
Ésto a todas luces es antagónico con el espíritu de la Constitución americana. Si sabe jugar esa vía, muy complicada, utópica, pero no inviable, igual se le pueden abrir puertas para ver la luz al final del túnel. Si no lo consigue, pero emprende esta vía, seguro que se gana el reconocimiento de más de uno.


Es una solución desesperada, que tiene como causas principales la precipitación de la decisión del jugador y la existencia de un sistema injusto que trata a los jugadores como esclavos. A veces el precio a pagar para cumplir los sueños es muy alto. Veremos que escoge Navarro, si lo fácil y vuelve a donde es el rey, o tira millas y pretende conseguir lo que sueña por todos los medios.


No sabéis como luchamos para que nuestros sueños se hagan realidad.



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Fotos: elmundodeportivo.es