CRECIENDO A LA SOMBRA

El color verde de los Celtics centra la atención de los ojos de todos los aficionados a la NBA. Su extraordinaria campaña, sorprendente para nosotros, está oscureciendo el papel de otros equipos, que sin tanto ruido, están construyendo un futuro que se prevé esplendoroso.
A miles de kilómetros de distancia de Boston, en la otra costa del país, en Los Ángeles, el “Maestro Zen” Phil está haciendo un equipo que con un par de retoques puede convertir a los Lakers en una Dinastía ganadora, como lo fueron con Shaq y Bryant.

LA PIEDRA ANGULAR

Aunque parezca mentira, la piedra angular del proyecto no es Kobe. Serán ganadores en la medida que siga creciendo su nueva perla. Hablamos de Andrew Bynum. Jugador de 20 años, que está en su segundo año como profesional, ya que llegó a la NBA directamente del High School(St. Joseph HS).
Desde el inicio, los técnicos angelinos vieron en Andrew una perla por pulir. Número 10 del Draft del 2006, desde un principio tuvo como tutor personal a uno de los 3 mejores Centers de la historia. De la mano de Jabbar, poco a poco el chico ha ido sacando provecho a su tremendo cuerpo.
Sus más de 7 pies y 130 kg de peso, le hacen demoledor cerca del aro. Karem le ha enseñado todos sus trucos. Verle hacer el ganchito cerca del aro pone los pelos de punta. Su juego de espalda a canasta es de los mejores de la actualidad. Encima tienen un don innato para capturar rebotes y sabe protegerse más que bien de las faltas.
Le queda mucho que mejorar, como ser más constante en ataque, saber situarse mejor para recibir más balones debajo, y mejorar en el pase cuando le hacen 2x1. Pero esto lo irá adquiriendo con los años. Sus números estos años hablan por si mismos. A día de hoy, 12,3 puntos, 9,8 rebotes, 2 tapones, y más del 60% en tiros. Todo esto en 28.5 minutos por partido.

SATÉLITES

Alrededor de Andrew, encontramos una serie de excelentes jugadores en la mejor edad de competir. Como relevos interiores, hay un número 1 del Draft como es Brown. A sus 25 años, el año pasado lo acabo a un buen nivel, aceptando su papel dentro del equipo y aportando intensidad que se le supone- Va a más y en febrero, una vez superada del todo su lesión, debe dar más músculo a la pintura de los Lakers.

Por fuera, Luke Walton, aporta las labores de intendencia tan importantes en todo conjunto, añadiendo una gran dosis de calidad. Mortal desde las esquinas, buen defensor, sólido en el rebote y con una gran capacidad de pase. A sus 27 años, solo puede ir hacia arriba su progresión.
También desde el perímetro, Trevor Ariza, es un bastión al que acogerse. Está en la plantilla después de un intercambio con Orlando. Con solo 22 años, ya lleva a sus espaldas 5 temporadas en la NBA. Alero alto, es parecido a Walton, pero con más físico, lo que le permite especializarse en la defensa. Suele anotar siempre en jugadas al contraataque o en el poste bajo, ya que no suele tirar mucho de 3.

En la dirección del equipo, dos proyectos como son Farmar(86) y Vujacic(84) que se están adaptando al juego en triángulos que dibuja en la pizarra Phi Jackson y que aprenden de los consejos de un humilde veterano como Derek Fisher.

LAS ESTRELLAS

Al pastel descrito anteriormente, le hemos de añadir la guinda. Hablamos, of course, de las 2 estrellas. Bryant y Odom están en la edad ideal de todo jugador. Con 29 y 28 años respectivamente, ambos son los líderes de un equipo lleno de jóvenes hambrientos y con clase.
De Kobe poco se puede decir que no se ha dicho. Si cabe, mencionar que este año tira menos que nunca. Que ha entendido que para crecer no siempre debe resolver él. Escoge mejor sus momentos de “chupon” y ha adoptado una conducta de padre protector de sus compañeros. El equipo está mejor que nunca, cuando él, ni mete como antes, ni pasa como antes, y rebotea como siempre. Buena señal para él y para el resto de jugadores.
De Odom decir que es una de nuestras debilidades. Verle en la pista es un placer incomparable. Lo hace todo bonito y fácil. A veces su actitud no parece l más profesional, pero solo superficialmente. Si rascas le ves que hace siempre lo que debe. Podría ser una mega estrella en cualquier equipo, pero ha arriesgado eso para formar parte de un conjunto que puede macar una dinastía en el futuro.

No nos olvidamos del resto de jugadores que forman el roster. Allí están Radmanovic(80) que aporta tiro exterior en momentos puntuales, está C.Mihm(79) luchando por salir de la especial de lesiones y demostrar lo que se le viene intuyendo desde hace un par de años. También anda por L.A. Turiaf(83) demostrando garra y sacrificio.

Cuantas veces nos han dicho que a veces un árbol no deja ver un bosque. En está ocasión creemos que está frase va que ni pintado. Detrás del sol de los Celtics, está creciendo sin prisas una plantilla que en un año puede dar miedo al resto.

No sabéis como disfrutamos viendo a los Lakers!

The Digital Garden

Fotos: nba.com